Hay imágenes que no necesitan mucho comentario porque hablan por sí mismas. Este caso es el que ahora tratamos.

En la calle Sol, bajo un bloque de pisos se encuentra el tramo conservado más importante, tanto por su extensión como por su estructura (contiene los estribos con que se cimentaba así como varias torres) de muralla romana de Alcalá del Río.

Las murallas de nuestro pueblo están catalogadas como BIC (Bien de Interés Cultural) desde 1949 que es el nivel de protección más alto según la legislación vigente, por lo que no solo deben tener esa máxima protección sino que deberían poder ser visitadas por los ciudadanos en determinados periodos de tiempo.
Por otro lado, y en este caso concreto, en el solar conocido como Los Valencianos, la existencia de este tramo de muralla ocasionó diversos problemas en la construcción de las viviendas que sobre él se asientan, y no por que estuvieran allí, sino por la deficiente normativa local y por la mala planificación de la promoción, con los correspondientes perjuicios para los vecinos que allí adquirieron en su momento una vivienda.

Con todo eso, tras varios años, este tramo de muralla, que hoy día se podría considerar como uno de los elementos arqueológicos más importante de Alcalá del Río presenta esta lamentable imagen, absolutamente descuidado, convertido en un almacén de obras y, lo más negativo, sin que pueda ser visitado por los alcalareños como parte fundamental de su patrimonio histórico.